Mi Huila: museo a cielo abierto
OPINIÓN
MI HUILA: MUSEO A CIELO ABIERTO
Escrito p or Manuel Salvador Molina
Hurtado
Abogado Constitucionalista y Administrativista
“La educación y la cultura son la base del
progreso y la felicidad de los pueblos”. Maruja Torres, periodista y
escritora española.
La Corporación Pitalito Ciudad Museo viene procurando desde su creación el enaltecer y
preponderar la vida digna del ciudadano, destinatario final de su accionar. Esto,
originariamente en el sur del Huila, pero
con radio de acción departamental, mediante la promoción de la democratización de
las expresiones artísticas y culturales
-en el entendido de que el ciudadano del común acceda a ellas- y el fomento de la intervención tanto de los
estamentos gubernamentales, verbi gracia la gobernación y las alcaldías comprometidas,
especialmente la de Pitalito, como de insignes personalidades y diversos
sectores de la colectividad que hasta la fecha se han identificado con este
loable y difícil propósito; que se han erigido como genuinos mecenas del arte,
la cultura y la ciencia: celosos amantes de su terruño, y guardianes
inspiradores de las humanidades.
Reconociendo, desde luego, que nada
hubiese sido posible sin el denodado esfuerzo e invaluable aporte desinteresado
de los artistas de la comarca.
Anotando que ya se han producido
importantes resultados en cuatro tablados que se constituyen como la entrada triunfal
a toda la geografía regional, que espera su turno participativo en este magno
proyecto, a saber: Pitalito, Ciudad Creativa; la Jagua, Centro Poblado
Embrujo Ancestral; municipio de Rivera,
Museo Vial José Eustasio Rivera; y,
la ciudad de Neiva, tramo de Mitos y Leyendas en el malecón del Río Magdalena.
Afortunadamente, el impacto generado ha
sido bastante generoso y lo mejor, es que se incrementa cada momento,
convirtiéndose en un alud que arrastra cada vez más conciencias hacia la
planicie de la concientización humanística, tan indispensable para poder llevar
estas tierras hacia el puerto de las culturas política y ciudadana, requisito imparajitable
para cualquier transformación.
Lo
expuesto, demanda el fortalecimiento de la solidaridad social, el
desprendimiento del sectarismo e intereses electorales, y el sentido de
pertenencia, sin que ello implique sacrificar el principio fundamental a imperar:
la nacionalidad universal, que nos hace ciudadanos del mundo. Sólo así,
podremos ser reconocidos por la comunidad internacional como una sociedad
pujante y humanista, con todas las ventajas que ello acarrea.
En
efecto, de la unión mancomunada de todos los actores políticos y sociales
democráticos de la región. y, ahora más que antes, de la subregión. Se le
reclama todo el brío y altruismo posibles para consolidar su presencia
protagónica en los niveles departamental y nacional, con miras a impulsar el
desarrollo integral e integrado de los municipios que la conforman y los
territorios circunvecinos que, en mucho, dependen del sur del Huila.
A propugnar
por el aprovechamiento óptimo de la vasta riqueza humana, natural, histórica y
cultural, tan abandonada al olvido, que caracteriza y distingue este amplio suelo.
Que le sobrevenga, como producto final forzoso, el desarrollo humano: individual
y colectivo. Incluso, como herramienta
eficaz para dignificar económicamente la existencia de los asociados: el arte, la
cultura y la ciencia, cuando se democratizan, revierten incontables e
inconmensurables dividendos de todo orden para el colectivo y, de contera,
especialmente, de ingresos monetarios y de consecución de bienestar para el
individuo. Se nutre el alma y se fortifica el cuerpo.
Por eso, se ha probado ya con suficiencia, que la
manifestación abrumadora y avasallante de la educación y la cultura, como
instrumentalización del desarrollo político de los pueblos, es el camino para
la cimentación de la Paz, la Democracia y la Libertad.
Aparte de que nada ni ninguna violencia, viniere de
donde viniere, podrá poner de rodillas eternamente a un Pueblo determinado a
romper las cadenas infligidas por la ignorancia y la indiferencia.
Se itera, solamente la conciencia humana humanizada,
inspirada en la educación, el arte y la cultura nos podrá retornar la alegría de
volver a ser hermanos, y de convivir, como otrora, respetuosa y sabiamente con
la naturaleza. Y arraigar en el alma que un nuevo amanecer nos espera anhelante
para desyerbar el camino de abrojos y espinas que hemos labrado a nuestros
hijos; para sembrarles de esperanzas un nuevo día, y, puedan, entonces, cosechar
de Paz y Bien un nuevo atardecer.
Para terminar, resulta oportuno hacer público
reconocimiento a la Corporación Pitalito Ciudad Museo
por la labor desempeñada en estos fines. Y, particularmente, a su
gestor, señor Geovanny Rojas Mosquera y a sus compañeros de desvelo, que por
razones de espacio y tiempo no puedo enunciar sus nombres, lamentablemente.
Timaná,
Huila, 6 de abril de 2024
Ex Personero Municipal de Timaná
Ex Consejero Departamental de Paz del Huila
Abogado Asesor
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