La ultraderecha está ganando la batalla cultural

 


LA ULTRADERECHA ESTÁ GANANDO LA BATALLA CULTURAL

ESCRITO POR: RAFAEL NORBONA*

Se suele atribuir el crecimiento de la ultraderecha a la manipulación mediática, pero hay otra razón más poderosa que suele eludirse: la popularidad de sus valores entre la clase media y la clase trabajadora. Cada vez hay más votantes que se identifican con el discurso nacionalista, xenófobo, misógino, homófobo, belicista y aporofóbico.




Los valores de la izquierda suscitan rechazo en sectores muy amplios de la población. Los hombres, especialmente los más jóvenes, se sienten amenazados por el éxito de las mujeres y las reivindicaciones feministas. Los nativos perciben la inmigración como una invasión, sobre todo en los barrios de la periferia. La visibilidad de las personas LGTBI incomoda a muchos heterosexuales.




La pobreza, lejos de estimular la solidaridad, genera malestar y desdén. Se ha interiorizado la idea calvinista de que el éxito es sinónimo de excelencia, y el fracaso, una prueba inequívoca de molicie y mediocridad. Se habla de restablecer el servicio militar y se piden fronteras más impenetrables.

No te pierdas este video:

El retroceso de la cultura en todos los frentes ha favorecido este giro hacia posiciones reaccionarias. En las ferias del libro, los autores que más venden son presentadores de televisión, youtubers e influencers. La figura del escritor comprometido casi ha desaparecido. Muchos ciudadanos votan a opciones políticas que les perjudican porque se identifican con su discurso de odio. No importa que la ultraderecha congele los salarios y las pensiones o recorte los presupuestos de la sanidad y la escuela públicas.




Lo que más pesa es que sus líderes -Ayuso, Milei, Le Pen, Orban, Meloni- escupen odio contra las mujeres, las personas LGTBI, los inmigrantes y los marginados. Muchos sueñan con un Bukele europeo. Solo eso explica el ascenso de figuras como Alvise, partidario de crear macrocárceles, o la impunidad de Ayuso, que dejó morir a 7.291 ancianos y con un entorno salpicado por la corrupción.


Los jueces, un cuerpo ultraconservador, y ciertos sectores del ejército y la policía, con una ideología poco afín a la libertad, el pluralismo y la tolerancia, aportan el margen de seguridad que necesitan los líderes de la ultraderecha para cometer sus fechorías. Y en la vieja izquierda se escuchan voces como las de Felipe González, elogiando a Meloni.

El mundo está girando hacia el fascismo y cada vez parece más difícil frenar esta peligrosa deriva histórica. Pienso que el mundo sería mejor si se leyera más a autores como Bertrand Russell, Blas de Otero o Albert Camus y no se perdiera el tiempo con vídeos cortos de 20 segundos, saturados de estupidez y mal gusto.



*Rafael_Narbona
Escritor, profesor de filosofía y crítico literario. Autor de Maestros de la felicidad. Madrid (España)

Comentarios

  1. Interesante la columna de Narbona. Una descripción casi exacta a los comportamientos que carcomen a la izquierda en el mundo. Poca lectura, politica de odio, corrupción rampante, adoctrinamiento profundo de las masas con narrativas alucinantes pero vacías, política del odio contra empleadores y promulgación excesiva de reclamación de derechos con el mínimo esfuerzo. La izquierda en el mundo es una ideología basada en el odio y el resentimiento que se quedó en los anaqueles del fracaso histórico.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Noticia más Populares

Un joven y una mujer fueron asesinados en Pitalito en las últimas 24 horas

VIDEO: Mercenarios colombianos estarían siendo castrados en Ucrania

VIDEO: 'Gracias a mi mayor López por arruinar mi vida. Algún día te veré en el infierno', escribió el suboficial que se suicidó en Facatativá

Un hombre fue asesinado en la madrugada de hoy en Pitalito

'Satanás' le propinó 15 puñaladas en la aorta y dos tiros en la cabeza a su excompañera sentimental

Facebook

Redes sociales.